¿Por que reaccionamos direrente ante un mismo estímulo?

Te has preguntado porque las personas reaccionan de distinta forma cuando les sucede algo igual o similar. Por ejemplo, imaginemos que vas caminando por la calle cuando un perro te empieza a ladrar y posteriormente corre hacia a ti y te muerde. Algunas personas quedaran (lo que se dice comúnmente) “traumadas”, mientras que otras ni lo recordaran o no le darán mayor importancia. Eysenck afirma que es por nuestra personalidad. Los introvertidos poseen la cualidad o defecto (como usted lo desee ver) de recordar cada segundo del trauma, es mas, días más tarde lo pueden revivir de forma extraordinaria, y a mi parecer hasta lo amplifican, agravan las cosas, (es lo que se dice cotidianamente que hacen una tormenta en un vaso de agua), pero ahora bien, del otro lado tenemos a los extrovertidos que tienen la capacidad de olvidar los hechos y de continuar su vida de forma natural, ya que su cerebro actuó en forma rápida (y eficiente) congelando el suceso traumático y lo envió a un baúl, por lo tanto la persona no lo recuerda y no presta mayor preocupación a lo sucedido. En cambio el cerebro del introvertido se queda totalmente prendido y alerta y guarda dicha información porque se encuentra en un momento de aprendizaje.

Ahora bien, también es interesante saber que uno puede tener una hiperactividad simpática esto quiere decir que uno sea más propenso a padecer de los nervios.
Por ejemplo, existen personas que siempre conservan la serenidad ante las situaciones difíciles, de riesgo o de emergencia y otras por el contrario que les es imposible guardar la calma y se ponen como locas y los nervios las invaden. Como podemos observar Eysenck afirma que dichas respuestas a sucesos alarmantes tiene su explicación fisiológica y esta es que el sistema nervioso simpático de algunas personas es hiperactivo (esto quiere decir que, se estimula de más) y provoca mucho estrés por tanto estas personas son muy propensas a padecer trastornos neuróticos. En este punto podemos encontrar a los que sufren de insomnio, de cambios repentinos de humor, de excitabilidad, los que sufren de sentimientos de inferioridad y por el otro lado podemos encontrar su parte bipolar que es ese estado de tranquilidad y de estabilidad, en donde obviamente si respondes a las emergencias, pero uno es capaz de mantenerse con calma pese a la adversidad.

Entonces por lo visto cada quien tiene un organismo muy particular y cada uno de nosotros reacciona de forma diferente debido a su constitución física-fisiológica, Eynseck menciona y cree firmemente que cada uno de nosotros tenemos un temperamento que no podemos cambiar y que esta ahí desde que nuestro padres nos engendran. También tenemos hábitos que nos van creando una personalidad muy definida, por esto, al mezclarse temperamento, hábitos, experiencias, vivencias y educación nos hacen ser el ser que somos.

Para finalizar me gustaría pedir un poco de reflexión, muchas veces las personas que nos rodean no nos entienden y nos “tachan” de “paranoicos” cuando conocen nuestras fobias y pánicos, y lo hacen porque obviamente ellos no le temen a lo mismo y su forma de reaccionar ante la situación es completamente distinta pero hay que recordar que hay diferentes personalidades y no debemos esperar que una persona actúe y se comporte como nosotros o como nosotros queremos, puesto que no funciona así, hay cosas que podemos controlar de nuestra personalidad y actitudes pero otras que no, puesto que son innatas y simplemente son parte de nosotros.